Sí. Así lo reconoce la Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de ordenación de las profesiones sanitarias (LOPS). En su artículo 2, apartado 2, se declara oficialmente que la Logopedia es una profesión sanitaria, titulada y regulada, al mismo nivel que otras como Enfermería, Fisioterapia, Podología u Óptica y Optometría.
Esta consideración implica que el logopeda está capacitado para evaluar, prevenir, diagnosticar y tratar trastornos de la comunicación, el lenguaje, la voz, la audición y la deglución, siempre desde un enfoque clínico y basado en la evidencia científica.
Además, muchas Comunidades Autónomas disponen de colegios profesionales de logopedas, que velan por la calidad del ejercicio profesional, el cumplimiento del código deontológico y la protección del usuario frente al intrusismo laboral.